El encuentro se llevó a cabo en la Universidad de Playa Ancha en Valparaíso, en la víspera del “II Congreso Nacional de Educación, Cultura y Sociedad: (Re) pensar las crisis educativas para construir futuro”.
Fuente: U. de Los Lagos
Este 8 de agosto, en la víspera del “II Congreso Nacional de Educación, Cultura y Sociedad: (Re) pensar las crisis educativas para construir futuro”, se reunieron en Valparaíso, en una jornada autoevaluativa, académicos/as y estudiantes del Doctorado Consorciado en Educación, programa que es desarrollado por las universidades de Los Lagos, de Playa Ancha, y de Antofagasta, y que forma parte del proyecto temático en Educación “Fortalecimiento de la investigación y formación avanzada en el sistema de universidades estatales”, que lleva a cabo el IESED-Chile.
De acuerdo con el coordinador del programa, el profesor de la UPLA, Dr. David González Miranda, la jornada fue considerada un hito cuyo objetivo era fomentar una cultura autoevaluativa entre los/as 25 docentes que forman el claustro académico del consorcio.
“Esta actividad nos permitió encontrarnos presencialmente para reflexionar activamente sobre nuestros procesos formativos y vislumbrar mejora continua, que es algo que en nuestro programa se instaló desde el primer minuto para poder garantizar aquello que es nuestro propósito principal, que es formar investigadores de excelencia en el campo de la educación”, sostuvo.
El programa de postgrado se ha desarrollado en su primer semestre en una modalidad de trabajo presencial, con un componente tecnológico de carácter híbrido, que permite una conexión en tiempo real entre las tres universidades.
En ese contexto, el Dr. González Miranda precisa que “conversamos sobre esta primera experiencia, y abordamos cada uno de los aspectos de la docencia de lo que significó la implementación de esta modalidad compartida desde el punto de vista tecnológico”.
Asimismo, puntualizó que “hicimos un proceso de autoevaluación desde un punto de vista inicial del programa, y también de poder avanzar en lo que significa la evaluación de la docencia en sí misma; por una parte, de los cursos que fuimos desarrollando en el primer semestre, así como de cada uno de los 25 docentes que pasaron por nuestras aulas solo como parte del claustro, además de las invitadas e invitados externos, nacionales e internacionales”
Por tanto, remarcó, “fue una jornada muy relevante donde resalto el valor de esto para que se transforme -como debe ser- en una tradición autoevaluativa de nuestro programa de postgrado”.
Por su parte, el académico del programa, profesor de la ULagos y coordinador del área “Formación docente para la justicia social” del IESED-Chile, Dr. Ilich Silva Peña, afirmó que la jornada de autoevaluación fue muy positiva “en torno a la riqueza que tiene el doctorado en su diversidad, al reunir a las y los académicos del claustro provenientes de tres universidades de diferentes zonas geográficas, con diferentes perspectivas metodológicas, epistemológicas y temáticas”.
Junto con ello, remarcó que el programa de postgrado es un enorme esfuerzo del consorcio que lo sostiene porque “en general, las universidades regionales no tenemos mucho apoyo porque en Chile, en un sistema neoliberal en donde el mercado manda, no hay apoyo a la ciencia, ni al trabajo académico, ni a la educación, entonces, nos vemos muy afectados frente a esa desigualdad, y eso es una debilidad en términos de sustentabilidad a largo plazo”.
Por último, el Dr. Silva Peña precisó que “el programa es un proyecto nuevo, que empezó este año y, por tanto, hay muchas cosas que mejorar, pero lo que me parece fundamental es que este primer semestre terminó muy bien, y los equipos de las distintas universidades fueron confluyendo hacia la construcción de una comunidad doctoral en Educación”.
Cabe recordar que el Doctorado Consorciado en Educación ULAGOS-UPLA-UA busca formar doctores/as con la capacidad de analizar, proponer e implementar proyectos en investigación educativa, especialmente en aquellas líneas que se asocian a los principales nudos críticos de cada macrozona y el país; reconoce las características de los territorios y comunidades donde están situadas las casas de estudio, y promueve la producción de conocimiento a nivel multiescalar, articulando lo local, regional, nacional e internacional.