El primero de marzo asumió como director general del Instituto Interuniversitario de Investigación Educativa, IESED-Chile, el académico e investigador de la Universidad de Los Lagos, Dr. Marcel Thezá Manríquez.
Thezá es licenciado en filosofía de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y magíster y doctor en Ciencias Políticas por la Universidad Católica de Lovaina, Bélgica. Fue Jefe de la División de Políticas Públicas del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación; director de la Sede Santiago, subdirector del Ceder y actualmente se desempeña como profesor investigador de la Universidad de los Lagos.
Su nombramiento deriva de la renuncia del Dr. Daniel Lopez Stefoni en octubre de 2024, quien fue fundador del instituto y ejerció el cargo durante casi 7 años. Esto abre una nueva etapa en el IESED-Chile, orientada hacia el fortalecimiento de la participación de universidades e investigadores/as en el instituto y una apertura hacia la colaboración internacional.
- ¿Cuáles son los principales desafíos y prioridades de su gestión?
El principal desafío es lograr un adecuado equilibrio entre aspectos de continuidad y cambio.
La continuidad tiene que ver con un relato del IESED-Chile, que es el desafío de trabajar de manera colaborativa entre las Universidades del Estado, y con una historia de siete años que debe ser observada y evaluada, pero cuyos principios y valores están absolutamente vigentes.
Esa historia o esa dinámica de continuidad tiene que ser equilibrada con una dimensión de cambio, que tiene que ver con la incorporación y fortalecimiento de ciertos aspectos que deben ser claves en una nueva gestión.
Lo primero es el impulso al trabajo de internacionalización, y eso se verá de manera muy concreta en el desarrollo de nuestro nuevo proyecto.
Segundo, la necesidad de que el IESED-Chile amplíe la participación de las universidades que son parte del instituto y, por otro lado, incorporar aquellas estatales que todavía no forman parte.
Tercero, es importante observar su lógica de funcionamiento institucional y hacer algunos cambios que potencien el trabajo académico. Vamos a dedicar una parte importante del actual semestre para efectos de diseñar y proponer una reforma académica que fortalezca el trabajo de nuestras áreas y de los instrumentos que nos hemos dado para el potenciamiento de la acción del instituto.
Y también consideramos que es importante poder impulsar algunas acciones que permitan mejorar la incidencia de este espacio tan rico en el proceso de toma de decisiones. Al IESED-Chile no sólo le interesa fortalecer la investigación en cuanto tal, sino que también nos interesa fortalecer una investigación con propósito, es decir, una investigación que tenga la capacidad de incidir de manera positiva en el desarrollo de las políticas públicas.
- ¿Cómo inspira el legado del anterior director a su gestión?
Daniel López ha sido un actor clave porque estuvo en el origen de una idea, y trasladar una idea a una materialidad no siempre es fácil. Yo diría que su primera herencia fue su capacidad de crear las condiciones, algunas materiales y otras de naturaleza simbólica, que permitiesen que una idea, como lo era en el pasado un instituto de estas características, fuese una realidad.
Obviamente Daniel no hizo ese trabajo solo, lo hizo con complicidades académicas de distintas universidades, que fueron esenciales para desarrollar este proyecto, pero yo diría que él cumplió un rol muy importante de orientación, de acompañamiento y de una cierta fraternidad que es muy importante.
También cumplió un rol muy clave en términos de perfilar la identidad del instituto, uno que va a contribuir al desarrollo de la investigación desde la perspectiva colaborativa y no poniendo el énfasis estrictamente en la superestructura institucional, sino más bien en las estructuras de base que son los académicos y académicas de las respectivas universidades. Por lo tanto, hay una dimensión teórica donde también Daniel hizo una contribución fundamental.
Por último, yo creo que tuvo siempre una preocupación por ir aportando innovación en el trabajo. Fueron 7 años de gestión que uno podría subdividir en distintas etapas; etapas que, además, leyeron bastante bien el escenario en el cual nuestras universidades tienen que desarrollarse. Por lo tanto, la gestión, la presencia y las ideas de Daniel van a ser recordadas por mucho tiempo, en un contexto de respeto de una historia que tiene que ser iluminadora desde la perspectiva de los desafíos futuros del instituto.
- ¿Cómo proyecta el trabajo con los coordinadores de área?
Planteaba inicialmente que hay que hacer una evaluación importante y rigurosa de cómo ha funcionado el instituto. Pienso que un trabajo inicial con las coordinaciones va a ser, lo reitero, proponernos una cierta reforma académica que mejore nuestro funcionamiento.
Algunas de esas ideas ya están contenidas en reflexiones que tuvimos en jornadas internas de trabajo durante el año 2024, por lo tanto, vamos a tener un desafío de propuesta de cambio en nuestro funcionamiento. Pero en esta lógica de equilibrio, entre continuidad y cambio, vamos a mantener lo que es fundamental, que es una amplia libertad de las coordinaciones y de los equipos para efectos del desarrollo del trabajo.
- ¿Coordinadores y equipos son partícipes también de este cambio?
Tienen que ser parte. No solo ahora, sino también en el tiempo tenemos que ir proponiéndonos cambios e innovaciones que mejoren el trabajo del IESED-Chile.
El abrirnos a una dimensión internacional es precisamente uno de esos cambios. Y que no es arbitrario, sino que es la respuesta a una demanda no prevista inicialmente en el trabajo del instituto y que tiene que ver con solicitudes de universidades extranjeras, académicos y académicas de otros países y coordinaciones que nos fueron proponiendo en el ámbito internacional.
El IESED-Chile debe tener un sistema de funcionamiento que permita ir adaptándose e ir leyendo adecuadamente esos nuevos contactos en los cuales la actividad académica debe desarrollarse.
- Productos como la revista, los informes y el boletín, ¿se mantendrán durante su gestión? ¿Qué otros esperan incorporar?
Bueno, tenemos que profundizar. Hay un trabajo que es un logro, y que fue transferido posteriormente a las universidades, que es el Doctorado Consorciado. Es importante que el instituto siga vinculado a esa iniciativa para efectos de potenciarla. Lo vamos a hacer, por ejemplo, con el proyecto de internacionalización.
También tenemos que seguir desarrollando toda la línea de publicaciones. Incluyo ahí a nuestra revista [Evidencia Educativa] que partió el año 2024, que debe tener un desarrollo el 2025 y ser repensada también a la luz de lo que son las exigencias actuales en materia de revistas académicas.
Tenemos un trabajo importante también de fortalecimiento de nuestra web semántica, pero tenemos que abrirnos, en el marco del nuevo proyecto de internacionalización, al desarrollo de repositorios y observatorios de características más globales. Es decir, espacios que puedan combinar, recoger, ordenar y compartir información de calidad, disponible para distintas instituciones en el plano nacional e internacional.
Los compromisos de nuestros nuevo proyecto nos obligan a abrirnos a nuevas iniciativas.
- ¿Cómo proyecta el trabajo con las universidades que conforman el IESED-Chile?
En general, los proyectos de esta naturaleza siempre van a producir ciertas asimetrías en términos de la participación de las instituciones, pero lo que queremos hacer es disminuir esa asimetría mejorando los mecanismos de participación de las universidades en el proyecto y la coordinación del instituto con las universidades.
Eso implica mejorar también el conocimiento que tengan las universidades acerca del IESED y tener un trabajo de invitación a las Universidades del Estado que aún no son parte, que son las menos, para efecto de que se incorporen activamente a nuestra tarea.
Examinar el funcionamiento académico e institucional pasa por propiciar mejores mecanismos de coordinación con las universidades, que son nuestro sostén institucional.